Tomar las riendas de la propia vida no significa únicamente lanzarse como loco sin un plan concreto hacia el más íntimo deseo de superación personal; si bien es cierto que cada persona es él autor de su propia historia, también es cierto que solo se puede ir más rápido a donde sea, pero en la compañía de una mente maestra se puede llegar más lejos y a lugares más hermosos; por mente maestra me refiero a un grupo de personas que persiguen las mismas metas, que desean lo mejor para sí y para sus semejantes y que están dispuestos a compartir fortaleza, experiencias y la esperanza de un mejor futuro para toda la humanidad... Hoy en día la preparación personal por medio del estudio de lo obvio es una responsabilidad del ser humano y aunque no todos poseemos las mismas capacidades de crecimiento mental, emocional y espiritual, si podemos dar nuestro mejor esfuerzo y hacerlo lo mejor que se puede manteniendo la calma, sin fastidiar a las demás personas con la prisa, el desasosiego y la ira resultados de la insatisfacción y la frustración personales...
La serenidad mental es una joya de la sabiduría, permite al hombre permanecer estable, calmado y sereno en los momentos en que lo lógico para algunas personas sería la preocupación, la prisa y la frustración porque los demás no comprenden sus aprensiones... La historia del hombre se escribe individualmente, el destino personal se escribe con cada pensamiento, sentimiento y las acciones que le siguen; desafortunadamente el noventa por ciento de la gente no quiere pensar educadamente y llevar a la acción las ideas propósitivas debido a que la pereza, el temor y la baja auto estima limitan su visión de las recompensas que le esperan a quien se esfuerza disciplinadamente por el cumplimiento de sus sueños; un comienzo por pequeño que este sea, puede activar el entusiasmo, un gran libro, una buena charla con algún amigo exitoso, una conferencia, un buen audio, la meditación y la oración pueden ayudarte a que hagas ese cambio hacia la prosperidad...
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