La Fe es la habilidad de ver lo que todavía no es visible y de lograr con imaginación constructiva las metas que aún están distantes; el ser humano que desarrolla un lenguaje refinado puede expresar su visión del futuro y conseguir que otras personas puedan ver la promesa de algo mejor, de un futuro que hace que los esfuerzos valgan la pena; estas capacidades de comunicación habilitan a los padres de familia para motivar a sus hijos hacia la superación constante y a los líderes para enaltecer la visión y las metas en sus equipos de trabajo...
La sofisticación de la personalidad y el refinamiento en el lenguaje también habilitan al ser humano para escuchar y comprender mejor los conceptos de éxito en la historia humana; historia que ilustra las vidas de quienes no se conforman únicamente con ser simples seguidores, porque han decidido convertirse en estudiantes activos de la filosofía del bien común... Estás personalidades no tienen que decir mucho en el arte de la persuasión debido a que la sofisticación en su carácter lo dice casi todo con un lenguaje sin sonido pero lleno de emociones y de los valores adquiridos durante la consecución de sus metas personales; el ser habla en voz alta y sin sonido acerca de los retos que ya han superados...
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