Desde niños algunas personas hemos experimentado un sentimiento de desventaja respecto a las habilidades de aquellos a quienes consideramos nuestra competencia en el deporte y aunque tratamos de repetir mentalmente, inclusive en voz alta una y otra vez que podemos ser mejores que cualquier otro individuo, parece que aun así existe algo que nos dice que de cualquier forma quedaremos rezagados respecto a las metas propuestas por las demás personas; pareciera que olvidamos nuestra calidad individual para decidir cuales son nuestros verdaderos retos y cuando los hemos alcanzado o superado sin necesidad de la malsana dependencia a compararnos con otra gente...
La comparación de un individuo con otro puede provocar lesiones físicas, desventuras emocionales e incluso la locura de la neurosis; los seres humanos debemos aceptar que en la vida existen cosas que podemos hacer debido a nuestras capacidades naturales e incluso aquellas que hemos desarrollado con el tiempo, el dinero y el esfuerzo propio o de nuestros padres; pero que aun con la conciencia de esta verdad también hay cosas que debemos admitir tal y como son, claro que sin conformarnos, porque siempre podemos ir mas allá y dar nuestro segundo esfuerzo; sin embargo, si debemos aceptar humildemente nuestra naturaleza como seres únicos e individuales dentro de la raza humana...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario...!