La percepción que se tiene de uno mismo refleja la oportunidad de la demás gente para respetar o tratar de manipular, es decir, las posturas que se adoptan determinan las interacciones entre los seres humanos; algunas personas adoptan el papel de víctimas, mientras que otras sustentan el rol de manipuladoras; estos comportamientos pueden observarse con mas frecuencia incluso en uno mismo cuando se participa en una presentación de ventas o se visita alguna tienda departamental en donde los vendedores necesariamente hacen un acercamiento mas personal con sus clientes, en estos casos se puede actuar como alguien desconfiado y temeroso de que se le venda algo o como alguien que sabe lo que quiere y cortésmente pide al vendedor un poco mas de espacio y tiempo; también cuando se asiste a una reunión en donde no se conoce a todos los presentes se puede actuar como el nuevo en el circulo social precavido, incluso tímido o comportarse como alguien que esta consciente de que puede hablar únicamente de lo que sabe sin mentir ni exagerar para sentirse parte del ambiente...
Es una realidad que no podemos controlar el tiempo, retrasarlo ni adelantarlo para que termine la reunión, la presentación de ventas o el clásico deportivo en el que se va en desventaja, pero si podemos participar de los eventos y actuar como uno mismo, sin posturas ni roles ficticios que lo único que generan es la oportunidad a que se nos considere de manera diferente a nuestra verdadera personalidad... Aceptar las circunstancias, las cosas y a las personas tal y son o están sucediendo es una actitud liberadora que permite que nuestras capacidades y habilidades individuales expresen nuestra verdadera esencia; debemos admitir que no se puede recompensar la grandeza de la personalidad, por lo tanto es innecesario exigir dividendos por ser coherente al pensar, sentir y actuar en consecuencia, porque los beneficios de hacerlo se adaptaran a uno en momento y circunstancia de cualquier manera si nuestra personalidad esta en sincronía con estas recompensas; hagase lo que se haga en el derrotero personal muy pronto dejara ser la tarea de interés si y sólo si, se hace con excelencia, porque alcanzar un nuevo nivel de desarrollo personal obliga al cambio para lograr aquello en lo que uno más enfoca su atención...
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