Recientemente participe en una junta matutina de motivación para un equipo de ventas y durante esta reunión el gerente explicaba algunos de los diferentes escenarios que los vendedores experimentan desde que despiertan por la mañana hasta que llegan a su lugar de desempeño; y entre la preparación mental, el desayuno, el traslado de su casa al trabajo, hasta sentarse con una tasa de cafe para escuchar el discurso matutino de su líder muchas emociones buscan su expresión para el día por transcurrir... Llegando al final de su platlica motivacional el gerente hizo dos preguntas que me parecieron por demas interesantes y para las cuales la mayoria de los asistentes no tenian respuestas bien definidas; ¿Por que hacen lo que hacen? ¿Para que hacer todo ese esfuerzo matutino si no se tiene un motivo bien definido? Y reflexionando imparcialmente me hago consciente de que los seres humanos tratamos de encontrar no solamente excusas en el exterior para el fracaso, pero también carecemos en ocasiones de un motivo bien definido que nos permita tener un ¿Por que? Verdadero para el éxito diario...
La consciencia personal, saber quienes somos en realidad, cuales son nuestras habilidades y debilidades, nos permite a los seres humanos ser ambiciosos y conformes a la vez, y estas dos cualidades funcionan como practica, como entrenamiento para ejercer la capacidad de ser fieles a las pequeñas cantidades a modo de estar preparados para que al desarrollar la personalidad sea mas sencillo mantener el entusiasmo en los hábitos y disciplinas verdaderamente saludables para las finanzas, la salud física, el pensamiento, pero sobre todo para arriesgar el ego que obstaculiza a la mente deseosa de abrirse a nuevas posibilidades... El estudio de lo obvio es esencial si se quiere evitar que las inquietudes le desvíen de sus metas; veamos por ejemplo todos esos planes que muchas personas se proponen realizar cuando llega el fin de año; para los primeros días de enero ya se han roto promesas y disuelto muchos de esos sueños que parecían tan fielmente proyectados; esto es obvio en la personalidad de mucha gente; y si es obvio cada vez, ¿porque no se sobreponen a esas circunstancias provocadas por si mismos? La respuesta puede estar en los patrones de conducta adoptados por el ego...
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