miércoles, 5 de febrero de 2014

DOS TIPOS DE INTELIGENCIA PARA CONVIVIR

Ser una persona emocionalmente inteligente no significa ser capaz de ahogar los sentimientos y actuar fríamente, sino poseer la habilidad para dirigir las emociones y equilibrarlas; podríamos decir que de hecho la personalidad de algunos individuos tiene dos distintas mentalidades habitando en un mismo cerebro, en donde una de ellas es verbal analítica y dominante; la otra es artística pero muda, misteriosa casi en su totalidad, es completamente sentimentalista y a diferencia de lo que algunas personas creen la gente hipersensible lejos de ser meramente débiles emocionales, parecen poseer un signo en su carácter que es simplemente mudo e iletrado, pero que puede aprender, en realidad percibe, siente y piensa a su manera, tambien se equivoca y acierta en sus decisiones; incluso en algunos casos puede ser superior al del otro hemisferio (sentimentalismo), la dificultad radica en poder comunicarse con el en forma no verbal, así que es nuestra responsabilidad entrenar la parte emocional de nuestra inteligencia...

La Inteligencia interpersonal entendida como la capacidad para comprender las intenciones, motivaciones y deseos de otras personas, así como La Inteligencia intrapersonal que se se conoce como la capacidad para comprenderse a uno mismo, apreciar los sentimientos, temores y motivaciones propios e individuales, parecen ser los dos formatos de "Inteligencia Emocional" mas estudiados... Es sumamente importante comprender el gran poder de las emociones sobre la mente pensante y la causa del frecuente conflicto existente entre los sentimientos y la razón... Todos conocemos a alguien que interviene constantemente en donde no ha sido invitado, seguramente es por que no ha encontrado nada interesante en si mismo (a), pero ¿Como esperar comprender a los demás si uno mismo no se entiende? En vano las preguntas como: ¿Por que si reconosco el dolor o placer que esto o aquello me causa, sigo cometiendo el mismo error? ¿Porque ser tan sarcástico (a), ofensivo (a), e iracundo (a) por algo que no acepto? La respuesta puede estar en el tipo de programación emocional y de pensamientos instalada en nosotros mismos desde la infancia; ayudados por los familia, la escuela, los amigos y todos aquellos ambientes sociales que han generado nuestras experiencias de vida...

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