lunes, 4 de marzo de 2013

EMOCIONES A LA VENTA Y A LA COMPRA

Cuando empece a incursionar en el negocio de las ventas como profesión y pude disfrutar de mis primeros éxitos, desarrolle un nuevo estilo de soberbia, defecto de carácter que me llevo hasta la oficina del director de ventas de la empresa para la cual trabajaba en ese momento; ¿la razón? fui a parar con el director debido a un desacuerdo con algunos compañeros de trabajo; obviamente con la personalidad que me caracterizaba, cuando me senté frente a el en su escritorio intenté defender mi postura con un argumento que creí que lo convencería de que yo tenia la razón sobre todo el asunto, mi justificación oculta era que la mayoría de los seres humanos, cuando todo va de maravilla, tendemos a creer que somos los descubridores del hilo negro de la vida, sin embargo aquel hombre que era mi jefe en ese periodo de mi vida laboral y que ahora es un muy buen amigo mío me detuvo en mi alegato y cuando finalmente guarde silencio y escuche lo que el tenía que decirme, aprendí una gran lección, me dijo: Ser un vendedor de ideas es un concepto que ha servido a muchas personas para tomar la dirección adecuada en las circunstancias de la vida diaria de todos los ambientes sociales; obviamente mientras yo escuchaba su conversación, pensaba, ¿Que puede este tipo enseñarme a mi, que soy el numero uno en ventas en este momento?... 

Compartió conmigo un concepto que me pareció tan interesante y apropiado que hasta esta fecha representa una gran motivación y un reto para la vida diaria, en esa conversación decidi darle un giro de ciento ochenta grados a mi soberbia actitud como vendedor, cuando abrí la mente a este concepto, me di cuenta de que todos desde que nacemos "vendemos y compramos emociones"  y eso me ha llevado a un cambio de ideas para mejorar mi personalidad... Lloramos de niños para conseguir un "si" a lo que queremos y si nos dicen que no, lloramos mas hasta conseguir lo que deseábamos y sino lo conseguíamos, aprendimos a aceptar debido a que nos ignoraban o nos explicaban a su manera y comprabamos la idea, ya en la adolescencia se llega a creer que tan solo la emoción ya no es suficiente y utilizamos la mentira para conseguir permisos con nuestros padres o justificar nuestras faltas a la escuela, es muy probable que estas conductas hayan sido aprendidas de los adultos cercanos a nosotros, después en la edad adulta seguimos vendiendo y cerrando tratos con la novia los amigos y la familia como lo hacíamos desde pequeños... La realidad es que todos "vendemos y compramos emociones" que nos causan cada una de las circunstancias de la vida ya sean reales o sugeridas, pero lo hacemos... Así que toda la teoría acerca de como hacer para vender, puede tener su verdadera base en la forma en que nos sentimos al escuchar, al ver, al sentir y al degustar algún producto, ya sea material o sensorial, así que no es necesario mentir para logra la venta de una idea...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario...!