domingo, 26 de enero de 2014

LIBERACION DE LA ENVIDIA

Disfrutar de la euforia que genera la competencia es una característica natural de la humanidad y se hace mas evidente cuando se va ganando terreno; ¿pero que pasa cuando se trata de algún fracaso? Resulta que la perspectiva mental y emocional de nuestra parte no es tan halagadora, especialmente si ya hemos sentenciado parte de nuestras vidas a la egocéntrica idea de ganar o perder, al pensamiento de todo o nada... ¿De que nos sirve ganar una discusión si lo que conseguimos es alimentar el ego, para después sufrir las consecuencias del resentimiento y la venganza de aquellos a quienes les hemos pisado los cayos con nuestra actitud? Quizá sea muy satisfactorio sentir que estamos venciendo en el juego de la vida por el momento, sin embargo, muy pocos de nosotros consideramos la posibilidad de que después de algunas derrotas, la humildad puede permitirnos admitir que el verdadero éxito en la vida de cada persona, se mide únicamente en base a la felicidad, alegría y libertad que se experimentan durante y al termino de cada jornada; en esos momentos de callada expectación en los que el pensamiento central es de honestidad para uno mismo, pensamiento que confirma que hemos hecho lo correcto...

Las satisfacciones momentáneas en nada pueden compararse con la alegría de saber que somos justos, verdaderos y amorosos en el trato con los demás; claro que inmediatamente habrá quien opine que derrotarse ante lo que no podemos manejar es una señal de que hemos fracasado; yo creo que esto no podría estar mas lejos de la realidad emocional de la humanidad, por que aquellos que hemos entendido que el derrotero de la vida se define como el camino hacia la meta final que todos tarde o temprano alcanzaremos, también hemos aprendido que es de los instantes de debilidad de donde nace el deseo y la búsqueda de fortaleza, sabemos que no importa cuan largo y difícil parezca el camino que se tenga que recorrer, siempre será mejor si estamos en armonía con nuestros semejantes, pues quien menos esperamos puede ser nuestra luz en la penumbra... Yo realmente creo que es de sabios equivocarse y corregir en el camino, por que el hacerlo significa conocimiento acompañado de una acción firme y sostenida por el animo de ser mejores seres humanos cada día... Aceptar la derrota ante la cosas que están fuera de nuestras competencias, nos permite saber que la vida siempre tiene tres respuestas para nuestras inquietudes emocionales y estas respuestas son:  SI...  NO... Existe algo mejor para ti, cuando aceptamos este simple hecho, nos condenamos al éxito aun a pesar de nosotros mismos...

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