miércoles, 20 de mayo de 2020

TRABAJAR EN LOS TALENTOS, ABRIRÁ EL CAMINO

Creo firmemente que poseer ciertos talentos no garantiza el éxito en la vida, hasta que estos se convierten en virtudes por medio del estudio y la práctica persistente; algunos de nosotros somos muy buenos para algunas cosas y otras personas son mejores para hacer algo diferente, el hecho es que si se trabaja en las habilidades personales, ellas nos han de abrir camino en la vida; la personalidad se puede esculpir como una obra de arte, se puede diseñar, rediseñar y sofisticar  con el estudio y la práctica de nuevas destrezas, valores y creencias; de que nos sirve juzgar o descalificar la rivalidad con alguien que posee competencias distintas a las nuestras? Para que obsesionarnos con ganar en toda competencia? Especialmente si tenemos bien claro hacia donde vamos; el valor máximo de la rivalidad radica en el aprendizaje que puede existir del uno al otro y no en la competencia egoísta que nos impele a valernos de los defectos de carácter para vencer, en vez de progresar juntos por el bien común; las interacciones positivas edifican y agradecen el liderazgo de aquellos que consiguen integrar a la familia, los amigos y a los compañeros de trabajo para desempeñarse en conjunto como una tribu con ideales y metas comunes...


La educación inconforme y reflexiva nos invita a integrar mejores prácticas para beneficios mutuos; la auto realización está estrechamente ligada a la cooperación entre las personas; la vida del ser humano antes de esta contingencia parecía estar regida mas por el pretender y el parecer que por la evolución del ser; hoy queda más claro que el conocimiento de uno mismo, así como el desarrollo del carácter optimizan el antes, el durante y el después de la educación tradicional; conocer y desarrollar las propias capacidades es cómo encender los faros de luz del auto mientras se viaja de noche a través de las curvas en la carretera; algunas de las más grandes azañas de la humanidad han sido inspiradas por la emocionalidad consciente que supera los desafíos en la vida; no es conveniente considerarse un producto terminado, se tiene que ir mejorando cada día, es imperativo seguir creciendo en conocimiento y habilidades para ser más productivos, pues es en la productividad en donde el ser humano diseña su destino...

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