Cuando dejamos de hacer algo, y que nos corresponde como parte de las responsabilidades en nuestra relación familiar o laboral, tenemos la tendencia a sentirnos culpables y por ende dispuestos a ser manipulados de alguna forma para pagar por eso que creemos es un error nuestro, sin embargo, este pensamiento sin compartirlo con alguien existe únicamente dentro de nosotros mismos, no deja de ser solamente una de nuestras ideas dando vueltas en la mente de nosotros y para nosotros; es una idea que nos incita a creer que le hemos fallado a alguien... En algunas ocasiones, estas ideas nos llevan mas allá y permitimos ser manipulados por aquellos a quienes creemos haberles fallado, pero al observar nuestro comportamiento sin prejuicios sobre nosotros o los demás, podemos darnos cuenta de que todo ha sido generado en nuestra mente con una clara invitación a sentirnos en deuda, culpables, manipulados, resentidos y posiblemente hasta iracundos por el aparente comportamiento de los demás hacia nosotros; es evidente que esto ha sido únicamente un monologo mental de nosotros y para nosotros... Es un grave error el abstenerse de preguntar si realmente hemos afectado a alguien con nuestra aparente falta, saber si realmente esta molesto (a) con nosotros antes de predisponernos a las actitudes negativas, es de vital importancia en el progreso de nuestras relaciones interpersonales... "El yo pienso que tu piensas de mi", es una falta de interacción terrible... La comunicación "emocionalmente inteligente" es una parte fundamental en las relaciones interpersonales sanas, nos permite prevenir cualquier desacuerdo inexistente...
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