EL AUTOCONOCIMIENTO ES SINÓNIMO DE LIBERTAD

El miedo es sin duda un obstáculo para el amor y la razón, puede fácilmente instigar a la ira, a la vanagloria y a la agresión, sirve de excusa para la culpa sensiblera e invariablemente prepara el terreno para la depresión que debilita el entusiasmo... Aunque es justo admitir que esta es una observación muy seria y quizá demasiado general del temor como emoción inherente al genero humano; también es justo decir que se ha descubierto a través de la experiencia y la observación que a pesar de su acostumbrada destructividad del miedo, este puede ser un punto de partida hacia mejores cosas en la vida... El miedo puede ser un escalón hacia la prudencia, la moralidad y el digno respeto hacia los demás, puede enseñarnos tanto la senda hacia la justicia como el camino hacia el abuso; por lo tanto, cuanto más justicia y respeto practiquemos hacia nosotros y nuestros semejantes, más pronto se diluyen los temores... Es un hecho que el temor no tiene que ser siempre destructivo, porque las lecciones de sus consecuencias nos pueden conducir a valores positivamente elevados; conseguir la libertad sobre el temor es una tarea para toda la vida, es un derrotero que no termina por completo... 

Al vernos asediados por las preocupaciones, quizá seriamente enfermos o en otras circunstancias de gran inseguridad, cada uno de nosotros reacciona de diferentes maneras, según sea el caso... Solamente el vanidoso (a) pretende estar totalmente libre del temor; aunque realmente su presunción tiene sus raíces en los temores que piensa haber olvidado temporalmente...  Nuestra tarea de superar el miedo tiene dos aspectos importantes, que son: Tratar de liberamos del miedo por medio de la fe tanto como nos sea posible, después, tendremos necesariamente que buscar el valor y la gracia necesarios para enfrentarnos de una forma constructiva con los temores que nos queden... El intentar comprender nuestros temores y los temores de los demás, no es sino la primera tarea en la practica de la "inteligencia emocional", la cuestión más importante es averiguar cómo y a dónde vamos desde aquí, por que los temores aunque tienen similitudes unos con otros, cada individuo hombre o mujer los manifiesta de manera diferente, con sus propias características de intensidad y duración; luego entonces, un minucioso inventario moral de nuestros haberes y deberes del pasado y el presente es imprescindible para enfrentar los temores de hoy con un conocimiento realista, para así alcanzar el poder que nos permite mejorar en actitud sobre estos asuntos del miedo...