El liderazgo en la familia, en el trabajo y el deporte está enfrentando un reto verdaderamente importante, hoy en día la auto educación está determinando el éxito de las nuevas generaciones y también el progreso de quienes estamos interesados en el desarrollo personal constante; la información no solamente llega con mayor facilidad y prontitud a las personas hoy en día, pero también está distrayendo con una facilidad preocupante nuestra atención a las personas, a las cosas y los eventos que verdaderamente importan... La pregunta es cómo convencemos a los jovencitos, a los clientes y a nosotros mismos de comprar un idea, un producto o una disciplina física de verdadero valor?
Mi abuela materna solía decir que una persona auténtica y compasiva siempre tendrá una mejor oportunidad para sobreponerse a cualquier viscisitud en la vida y hoy más que en otras épocas de mi vida creo que es imperativo regresar nuestra atención a los valores importantes en las relaciones interpersonales; la confianza necesaria para vender una buena idea se gana con una personalidad bien edificada y una filosofía personal basada en los principios de la civilidad, entendiendo por este concepto el manejo inteligente de las emociones; la civilidad no se aprende únicamente con la instrucción escolar tradicional, se aprende, mejora y corrige con la auto educación y la práctica de los valores humanos, hagamos este cambio consciente y necesario de paradigmas para mejorar nuestra sociedad...
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