Para la nueva cultura corporativa la voluntad es prioridad, incluso antes que los recursos, es decir, conseguir que las nuevas y no tan nuevas generaciones estén dispuestas a entregarse en cuerpo y alma a una tarea requiere de líderes que convenzan con el ejemplo, bastiones de confianza que no solamente ostenten un cargo, pero que se hagan cargo de las personas que tienen la responsabilidad de conseguir los resultados en un derrotero que no tiene fin, porque así son los negocios y el buen vivir, no terminan al conseguir una meta, siempre van hacia adelante y hoy es más atractivo y vigorizante el quien llega uno a ser como persona mientras participa en el equipo...
Aprender a desarrollar y nutrir el liderazgo es una tarea sin limites; un líder es el eslabón entre el bienestar del equipo y su fe en un propósito digno por un lado y los resultados que se obtienen con la voluntad y el esfuerzo del equipo por el otro... En los ambientes competitivos incentivar el desempeño es importante, sin embargo, resulta ser mucho más productivo incentivar el carácter y el comportamiento de los miembros del equipo, porque no concibo nada mejor que el compromiso y la lealtad entre las personas que buscan el bienestar común cuando van camino a sus metas; el no importa como llegues, pero llega, carece de ética y valor en la nueva cultura corporativa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario...!