martes, 28 de abril de 2020

LA CASA DE LOS ESPEJOS

Cuando niños algunos de nosotros tuvimos la oportunidad de asistir a alguna feria ambulante en donde una de las atracciones mas divertidas era “La Casa de los espejos", ahí podíamos imaginar que nuestro cuerpo era diferente por que eso era lo que veíamos en el reflejo que los espejos nos brindaban de nosotros; algunos gordos, otros altos, flacos, bajitos de estatura, raros en diferentes formas y sin embargo, era solamente nuestra imaginación espoleada por nuestra imagen en un espejo, ya que en el mundo real para nosotros nada había cambiado, era solo una percepción divertida en unos momentos excitantes... 


Algo similar ocurre cuando observamos nuestro reflejo en el carácter de otras personas, especialmente cuando criticamos su comportamiento; bien dicen los que saben, “Lo que te choca, te checa"; esto significa que cuando algo nos atrae o nos disgusta de nuestros semejantes, es muy probable que nosotros mismos seamos poseedores de características muy similares; es un buen ejercicio mental el observar nuestro reflejo en ellos como en el espejo y tal vez descubriremos que eso que juzgamos es solamente un reflejo de los defectos de carácter que tanto trabajo nos cuesta aceptar en nosotros mismos; quizá estemos pensando, mira que desobligado (a), le falta valor es muy cobarde, es muy soberbio (a), debería ser mas amable conmigo ¿por que es tan impulsivo (a)? Mira nada mas que egocéntrico (a) es, en todo se fija, etc; o quizá digamos, me gusta todo lo que el o ella representa para su familia, yo quisiera ser así... 


Un inventario moral honesto y constante de nosotros mismos, nos permitirá si así lo decidimos, admitir, reflexionar y corregir nuestros propios defectos de carácter para encaminarnos a ser mejores hombres y mujeres en un mundo que nos ofrece cada ves mas retos emocionales a superar, especialmente en estos momentos de interacción obligada con nuestras seres queridos en casa; esta es la mejor oportunidad que tenemos para ejercitar la terapia del espejo, para hacer un alto en el camino, admitir y corregirnos a nosotros y no a quienes nos aman, nuestra responsabilidad es barrer únicamente nuestro lado de la calle y amarles como son...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario...!