Mientras se trate de estar convencidos de que se puede vivir exclusivamente a base de la inteligencia humana y de las fuerzas individuales será imposible desarrollar las capacidades del amor, la fe, la esperanza y la mesura emocional... Ciertamente los seres humanos hemos sido dotados con instintos para un propósito, pero la necesidad desmesurada de sexo, poder y dinero provoca en los algunos individuos un egocentrismo tal, que llegan a pensar que todo en su vida lo pueden tener bajo su propio control si así lo desean, incluyendo a las personas que les aman; algunos de estos personajes no se dan cuenta de que esta exigencia emocional de control puede deberse a acontecimientos que tienen su origen en la infancia y que estos síntomas característicos de una personalidad ingobernable pueden afectar de manera contundente sus vidas como adultos... Ser parte de las estadísticas en este sentido hoy en día no es de extrañarse; aparentemente mas de uno de esos individuos, hombres o mujeres que parecen mas cuerdos, han sido empujados a olvidarse de la moralidad y la ética, al enfocarse en la absurda idea de que los seres a quienes aman tienen la obligación de amarles y hacer lo que ellos desean; lo cual en la realidad nunca ocurre...
Es un hecho que si los hombres y las mujeres no nos interesáramos por la seguridad personal, ni hiciéramos algún esfuerzo para satisfacer las necesidades básicas de alimento en la familia o construir nuestro hogar, no sobreviviríamos... Si no buscáramos la reproducción de la especie humana, la tierra no tendría población, si no existiera entre los hombres y las mujeres el instinto social, si no nos importara la compañía de nuestros semejantes, la capacidad para vivir y compartir no existiría; por lo tanto, estos deseos de relaciones sexuales, de seguridad material, de estabilidad emocional y de compañía son perfectamente justos y necesarios, ciertamente son dones para la humanidad... Sin embargo estos instintos tan necesarios para nuestra existencia , nos dominan e insisten en dominar nuestra vida... Es imperativo desarrollar un ideal cuerdo, coherente y solido acerca del presente y el futuro de nuestra personalidad y para ello es necesario reconocer que nuestras facultades físicas, emocionales y mentales, así como nuestros instintos naturales no pueden ser usados a la ligera o egoístamente y aunque las circunstancias pueden llegar a determinar en nosotros actitudes que probablemente no esten de acuerdo con las expectativas de los demás, eso no significa que el amor haya salido por la ventana, como reza un verso conocido, simplemente puede ser que sea necesario desarrollar mas la inteligencia emocional adquiriendo humildad para el intelecto...
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