martes, 2 de octubre de 2012

EL JUSTO MEDIO EN EL CARÁCTER


Antes de incorporarnos a un nuevo estilo de vida, es probable que a algunos de nosotros nos convenga el darnos cuenta de lo poco afectuosos que hemos sido con quien mas nos ama... Es posible que desde los tiempos en que asistíamos a la escuela ya prestábamos muy poca atención a lo que nos decían nuestros padres, quizá hasta nos costaba trabajo entablar una amistad sincera con alguien sin esperar algo a cambio, aun que fuera solamente su aprobación a cualquiera de nuestros asuntos; algunos individuos se sumergen tanto en lo suyo que ni siquiera se molestan en tener contacto con la familia al llegar a casa... Algunos incluso después del matrimonio hemos estimado muy poco a la esposa (o)... Tal vez mas de una vez hayamos dejado de lado alguna invitación a participar en un juego romántico con la pareja mientras nos íbamos a pasar un rato agradable con las amistades... Es nuestra responsabilidad el recordar que cuando se presta poca atención a los hijos, a la pareja a la familia o a los amigos verdaderos, estamos poniendo en riesgo nuestra conexión sentimental con ellos y ellas... Debemos tratar de comprenderlos y ser verdaderos compañeros (as), por que nuestra actitud puede alejarles de nuestros círculos de influencia y tal vez se olviden de nosotros también...

El siguiente dicho popular me trajo a la memoria lo que quiero transmitir: "Ni tanto que queme al santo, ni tanto que no lo alumbre"... Quizá este es el momento para preguntarnos: ¿Hemos dejado de lado el amor a nuestros semejantes por atender únicamente lo nuestro?... Tal vez es tiempo para hablar y actuar honestamente con los demás y con nosotros mismos, si queremos gozar de tranquilidad emocional... Es importante hacer a un lado el egocentrismo, si queremos disfrutar de una buena experiencia de vida, y para que esto suceda, debemos evitar en lo posible  que nos trastorne emocionalmente lo que suceda con nuestras relaciones de pareja, de familia o de amistad... Si lo que deseamos es sentir una profunda seguridad interior, debemos confiar en la bondad y fines del espíritu del universo... Debemos ser fieles a nuestros ideales... Es axiomático para el progreso personal, el avanzar hacia algo mejor cada día, para así alejarnos de nuestros antiguos modos de reaccionar... Un buen principio para esta tarea es no contestar ni defendernos demasiado contra la acusación, ya sea falsa o verdadera... Es importante aceptar la critica tal como admitimos la alabanza... La realidad es que solamente uno mismo puede juzgar sobre su yo verdadero... Es necesario cada día aspirar a vivir libres del poder nocivo de la critica y los juicios de los demás...

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