LA INFLUENCIA DE UNA OPINIÓN DURANTE LA INFANCIA

Cuando éramos niños algunos de nosotros pasábamos la tarde después de asistir a la escuela en casa de nuestros abuelos, de nuestros primos o con alguien de la confianza de nuestros padres mientras ellos trabajaban para mantener nuestro hogar en marcha, por lo tanto estábamos a merced de las conversaciones y comentarios de la gente que vivía en esos lugares hasta que mama o papa llegaba a recogernos para llevarnos a nuestra casa para descansar durante la noche y prepararnos para la rutina del día siguiente... Así que no es un secreto para ninguno de los que experimentamos esas circunstancias durante la infancia que las opiniones de la gente a nuestro alrededor en esos momentos incluyendo la crueldad excesiva de algunos niños y adolescentes, generaban una influencia negativa en nuestra manera de percibir la realidad tan natural de nuestra familia... Algunas de las opiniones que se escuchaban en los sitios en donde nos cuidaban durante la tarde, ciertamente eran sin la intención de herir la susceptibilidad de un niño (a), pero cuando no se esta preparado emocionalmente o bien instruido para asimilar ciertos juicios, sobre todo cuando estos son acerca de nuestros padres, hermanos (as) y nosotros mismos, estas opiniones pueden tener una influencia negativa en el desarrollo de cualquier ser humano...

Hoy existe una mayor disponibilidad de información para quienes son padres y madres de familia, que puede habilitarles para preparar a los niños y niñas a mantener una actitud equilibrada y real con respecto a opiniones como las siguientes: Todos los que comen verduras son conejos, tu mama o tu papa son esto o aquello, tu hermanito (a) es muy sucio (a), tus zapatos ya están fuera de moda, a ti no te compran lo que a mi si, etc... Todas estas criticas, llamadas por algunos, opiniones inocentes, representan en un menor de edad un atentado contra la integridad emocional y pueden generar como lo hicieron en algunos de nosotros un impacto negativo en en nuestras vidas y que puede orillar a cualquier individuo al resentimiento, la culpabilidad, el rencor y la ira; no solamente en contra de quien emite estos juicios, sino en contra de sus propios padres, por que para un niño (a) puede parecer que lo que dicen esas voces son verdades que deberían ser prevenidas por sus padres... Claro que esto es solamente una muestra de que la realidad de algunos pequeñines puede estar desprovista del cuidado emocional que se necesita en la infancia... Esta realidad natural puede estar justificada por los motivos correctos, como es el hecho de que todos los padres y madres tienen que trabajar para mantener el hogar funcionando, sin embargo, yo creo que el hubiera no existe, así que hoy podemos hacer la diferencia dedicando algún tiempo a preguntar, a escuchar atentamente y a influenciar adecuadamente con el ejemplo a nuestras nuevas generaciones para que estén preparados (as) emocionalmente para cualquier actitud, opinión o juicio, mal o bien intencionado en cualquier momento y lugar...