lunes, 26 de noviembre de 2012

DE LA CULTURA DEL DOLOR, AL AMOR CONSCIENTE

Por razones que desconozco los seres humanos estamos habituados a sentir cierta satisfacción cuando algo genera reacciones emocionales de tristeza, melancolía, preocupación, ira o resentimiento en la propia personalidad, estas actitudes pueden alimentar el estrés y disminuir las capacidades emocionales que mantienen en nosotros el buen animo; estas actitudes las podemos corroborar al hacernos consientes de la música que en ocasiones escuchamos, las películas o programas televisivos a los que estamos acostumbrados o el extraño deseo de rumiar nuestras preocupaciones una y otra vez en cada oportunidad, con los amigos, la familia o el trabajo; paradójicamente algunos individuos creen que compartiendo la miseria emocional que les acompaña en todo lugar, lograran sentirse mejor, esto lo hacen infectando con el virus de la negatividad en cualquier ambiente social al que tienen acceso, otras personas van mas allá con la búsqueda del aislamiento depresivo, alegando que lejos de la realidad se sienten mejor... Así que ya sea consciente, inconscientemente o con la ayuda de alguna substancia adictiva estas actitudes van en contra de nuestra naturaleza humana... En esos momentos actuamos como el niño o niña que silba en la obscuridad, pretendiendo que que nada realmente le abruma... Ha llegado el momento de cambiar nuestra cultura del dolor por algo mas productivo dentro de nuestra personalidad, "El Amor Consciente"...

No estoy seguro de la fecha exacta para el cambio emocional y espiritual que ha sido anunciando por diferentes culturas a lo largo de los años y que aparentemente tendrá lugar en algún momento durante el mes de diciembre del año 2012, de lo que si estoy seguro, es de que todos los seres humanos tenemos siempre a nuestro alcance la oportunidad de hacernos conscientes de nuestras conductas, por que estas son las que afectan o benefician nuestras relaciones intrapersonal e interpersonales, todos tenemos la oportunidad de reinventar nuestra personalidad en algún momento de nuestras vidas y por ende, nuestro espíritu puede ser alimentado sanamente... Algunos de nosotros tenemos diferentes oportunidades de cambiar para bien o para mejor, pero nuestra falta de atención a la vida y la ausencia de las intenciones o motivos correctos no son parte de nuestra mentalidad... Las cosas no solamente suceden, somos nosotros los que hacemos nuestras propias elecciones y decidirnos a actuar con amor conscientemente, es lo mejor que podemos hacer en este momento, evitemos levantar voz y en vez de eso dialoguemos, hagamos algo bueno por alguien mas y realicemos nuestras responsabilidades con alegría en la familia, en el trabajo y en todos nuestros ambientes sociales, evitemos los conflictos creados por la emociones malsanas, en su lugar llevemos a acabo pequeñas tareas de amor y hagamos esto por convicción, "hacernos conscientemente amorosos" no requiere un cataclismo...

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