El resentimiento o mejor dicho, el volver a sentir, regularmente esta asociado a situaciones desagradables reales o imaginarias que pueden provocar daños físicos, mentales y emocionales en aquellos que lo experimentan en su interior y también a todos aquellos que representan el aparente motivo de esa emoción malsana... Una de las mayores fuentes del resentimiento, es la de tratar de imponer nuestro punto de vista a una o varias personas y querer guiar su vida... Cuando les decimos “lo que deben hacer” y “nos dicen no”, creamos resentimientos por partida doble... Primero, nos sentimos ofendidos porque no se hizo lo que queríamos... Segundo, la otra persona (s) se ofende (n) porque no la (s) aceptamos tal y como son... Y esto tiende a convertirse en un círculo enfermizo sin final… Detener cualquier acción ofensiva, sea verbal, física o de pensamiento, así como reflexionar sobre nuestros motivos verdaderos y corregir nuestra actitud puede evitarnos la generación de resentimientos...
El perdón como herramienta emocional es dejar de darle vueltas al resentimiento en nuestra mente, parar de hablar de ello como si fuera el motor de nuestros días; y eso irá diluyendo en la práctica de la comprensión y el amor cualquiera de sus efectos... Debemos aceptar que todas las personas tienen el derecho divino de guiar su vida como les plazca, aprenderán de sus errores por sí mismos… Además, la gente no cambia con la critica, por lo tanto, es mas conveniente para nosotros dejar de decirles lo que tienen que hacer para agradarnos mas, "Vive y deja Vivir", es una formula que funciona de maravilla para evitar la creación de resentimientos innecesarios... Si deseamos que se nos tome en cuenta en la familia, con los amigos, en el trabajo o en cualquiera de los círculos sociales en donde convivimos, debemos admitir que la participación en cualquier actividad cuyos objetivos incluyen el bienestar común, siempre será una decisión personal, que puede ser inducida por la fuerza creando así resentimientos o por la convicción que se genere sobre los ideales fomentados por los hombres y mujeres que poseen la capacidad emocional del liderazgo...
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