Este día por la mañana me vinieron a la mente con extrema claridad las palabras de mi madre durante mi infancia mientras me educaba con respecto a la cortesía y al buen trato a la mujer, habré tenido yo unos diez años de vida en el momento en que me enseño mientras caminábamos por la calle de la ciudad donde vivíamos, que el hombre siempre camina por el lado de afuera de la banqueta, que es mi obligación abrir la puerta a cualquier mujer y cederle el paso a ella o a cualquier persona en general para que pase antes de que yo lo haga, que debo de ceder el asiento a las damas en todo momento, que es mi responsabilidad extender la mano para ayudar a bajar un escalón a las mujeres, lo soliciten o no, que debo considerar a cualquier mujer con el respeto que le daría a mi propia madre en cualquier situación; y otras maravillosos lineamientos de conducta y civilidad que un buen hombre debería de expresar como parte de su personalidad y que hoy en día ya no representan ni siquiera motivo de recuerdo o consideración para la mayoría de la gente... Y es que parece que se nos fue de largo el punto de equilibrio en la linea del trato entre nosotros, tanto al sexo masculino como al femenino... Estoy seguro de que existen individuos de ambos sexos que están conformes con las conductas actuales y eso esta bien para ellos y ellas, de hecho, ese no es el argumento en este articulo, pues "vivir y dejar vivir" es un axioma en la vida...
Es un hecho, que la soberbia actitud tanto de los hombres como de las mujeres nos ha estado alejando del comportamiento de amor, respeto y civilidad que todos merecemos, por un lado, la mujer en la defensa de la "aparente liberación femenina" defiende su postura y con sus actitudes ahuyenta a los hombres de buenos sentimientos pero con baja auto-estima y por el otro, los hombres soberbios mantenemos a las mujeres privadas del trato de caballerosidad con la excusa de que ellas se lo han ganado con su propio comportamiento, sin embargo, la verdad es que a todos aquellos que nos gusta la caballerosidad estamos dejando ir la oportunidad de sentirnos útiles y serviciales o bien servidas (os) por las conductas que se nos han enseñado de generación en generación... Yo me pronuncio en favor de una reconsideración de las actitudes de amor cariño y afecto entre hombres y mujeres, porque ya es tiempo de re-inventarnos emocionalmente... Es cierto que el progreso de la humanidad requiere de cambios constantes en el comportamiento de los seres humanos para ajustarnos a la actualidad, pero las buenas conductas de civilidad no son inherentes a los seres humanos; para ajustarnos a nuestras diferentes realidades es necesario retomar lo mejor de la enseñanza de los padres al los hijos, es imperativo hacer una reflexión en estos momentos en que un ciclo mas de la humanidad esta por terminar y como un acto de buena voluntad retomemos el respeto a las buenas costumbres...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario...!